INTELIGENCIA ESTRATÉGICA.. Una columna de @hector_mperez

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En pocos estudios Académicos o de discusión de nuestro Estado, han abordado la Inteligencia Estratégica como un medio en los escenarios Políticos de nuestro devenir Social y Político, al abordar específicamente a la Inteligencia Estratégica, se busca tratar sobre el ámbito de mayor complejidad que está íntimamente ligado a los aspectos más delicados de los intereses de nuestro Estado.

Puebla sigue en la búsqueda de paradigmas propios y adecuados para enfrentar amenazas emergentes y dinámicas y sobre todo contar con una Inteligencia Estratégica predictiva, oportuna y eficiente. En estos contextos, se ha logrado poner en marcha metodologías y saberes que se adaptan a nuestros tiempos pero que su insipiente forma de aplicación genera productos inconclusos.

La Institucionalidad y los Sistemas, intentan seguir estos pasos y al menos, en muchos de nuestros Estados de la República, han dimensionado la importancia de la profesionalización y legislación de la Inteligencia Estratégica con sus respectivas implicaciones.

Si bien la Inteligencia Estratégica, toca todos los ámbitos de la vida de la Sociedad, siempre está íntimamente ligada al análisis de las condiciones de Seguridad Ciudadana y de la Defensa de la misma Sociedad. En tal sentido, y pese que Puebla era considerada un Estado de Paz sin violencia, sin conflictos de Delincuencia Organizada, es escenario de altos niveles de violencia y fenómenos que por su complejidad requieren de lecturas cada vez más especializadas que conjuguen miradas de donde nos encontrábamos y donde estamos parados hoy en día; en lo cultural y social, para desentrañar las causas, y ofrecer respuestas adecuadas para la toma de decisiones de una Autoridad, que hoy lamentablemente se encuentra dando más partes policiales que estructuras de solución Integrales.

La Inteligencia Estratégica, es considerada como la máxima instancia evolutiva de la actividad de la Inteligencia; luego entonces, la urgencia de que las Políticas Públicas de nuestro Estado de Puebla, empiecen a tejer los entramados de Instituciones y procesos programáticos que conlleven a una Inteligencia Estratégica, con la finalidad de contener un histórico de los efectos que lastiman la Seguridad de los Ciudadanos y las realidades actuales y actuar en consecuencia.

Históricamente en Puebla, la cuestión de la Inteligencia Estratégica no sólo no ocupó espacios relevantes dentro de la producción Científica local, sino que cuantitativamente su presencia en ese ámbito fluctuó entre la escasez y la nulidad. Desde un punto de vista cualitativo la situación no fue menos preocupante, pues el persistente desconocimiento de la ciudadanía sobre lo que significa esa actividad, ha facilitado que en el imaginario colectivo, se instalen grupos delincuenciales con los efectos que hoy conocemos y leemos en los diarios constantemente.

Los procesos Democráticos, tan mencionados para conducir los Gobiernos en nuestro Estado, ha causado negativas percepciones que emplean irrestrictamente recursos humanos y materiales que se enfocan más a objetivos puntuales del Gobierno en turno que de un interés Colectivo y que como se ve en diversas acciones vulneran periódicamente los Derechos Humanos y las libertades de los Ciudadanos y que suelen estar exentas de las prácticas de control con características de una Democracia sana. La Inteligencia Estratégica permite evitar lo antes citado y generar certeza y control.

La Inteligencia Estratégica como tal, al hablar de ello lo circunscribimos de inmediato en nuestras mentes a lo Militar, pero nada de ello es más erróneo, en el proceso de recopilación para obtención de un producto es de derivación social, el segundo perfil de la Inteligencia Estratégica es que el producto apunte a corto, mediano y largo plazo, y como tercer punto, que el producto sea contundente para el poder decisorio, que trasciende en la inmediatez y la coyuntura para la identificación por el Estado, con un horizonte temporal mayor, para tanto amenazas reales o potenciales como oportunidades de contrarrestarlas.

Para los Estados de nuestro México, en rigor de verdad la Inteligencia Estratégica, constituye una herramienta fundamental en el marco de sus esfuerzos para prevenir, combatir y neutralizar las amenazas y riesgos que ciernen sobre la sociedad y los ciudadanos que la integran de los factores delincuenciales del Crimen, y su contexto de daño colateral que siempre existe. En ese sentido, más allá de las particularidades de cada Estado en esta actividad, considero cinco condiciones básicas que debe cumplir la Inteligencia Estratégica en nuestro Estado, para cumplir su cometido con eficacia y eficiencia, en un marco de plena vigencia del Estado de Derecho.

En primer lugar, en lo relativo a la etapa de recolección en la base de la pirámide informacional, que sea con fuentes de optimización precisas, pues el factor humano si bien es la fuente primordial también se puede considerar de vicios de confianza y de dar por hecho lo recolectado.

Segundo, es de suma importancia que las capacidades de análisis, sean provenientes de profesionales en cuestiones específicas, con alta capacidad interpretativa y profundos conocimientos culturales, inclusive idiosincráticos sobre la cuestión tratada, sobra decirlo aptos para trabajo en colectividad y capacidad de frustración.

En tercer terminó, con una categoría de condición imprescindible lo intergubernamental, pues hoy en día las fronteras Estatales, no deben de ser un elemento de alejamiento sino la suma de voluntades para un mismo fin. Estos desafíos, del combate a la Delincuencia Organizada y no Organizada, nos colocan ante un hecho evidente o somos vulnerables ante la Delincuencia o somos fuertes en unión de esfuerzos y estrategias conducentes hacia una Paz Social anhelada.

Una cuarta condición, para cumplir con la Inteligencia Estratégica en los tiempos actuales, consiste en el desarrollo de una adecuada capacidad para identificar tendencias y diseñar escenarios de mediano y largo plazo basados en enfoques metodológicos productivos y prospectivos para puntualizar informes reservados sobre cuestiones puntuales y apreciaciones de nivel estratégico y de carácter público.

La quinta condición básica, que debe cumplir la Inteligencia Estratégica, constituye la más importante pues atraviesa a las anteriores justificándolas y orientándolas. En concreto, consiste en proporcionar a sus usuarios un producto de alta calidad a tono con la complejidad de los tiempos y colabora a la toma de decisiones.

Cada Estado despliega sus capacidades, en prosecución de los objetivos que derivan de sus intereses en materia de Seguridad. El rasgo distintivo de ese contexto, es lo que delimita la eficiencia y eficacia  contra el fracaso que hemos visto cotidianamente, adoptar un modelo de Inteligencia Estratégica, es difícil dado el grado de heterogeneidad que se observa en cada Estado, pero resulta imprescindible para generar en el camino un Estado de Derecho, con el respeto de los Derechos Humanos, la tan anhelada Justicia que en muchas ocasiones es violentada hasta en el Delincuente más insignificante, y que conlleva a su libertad, pues no se reúne las condiciones de las carpetas de investigación adecuadamente, por la falta de información precisa.

Esto planteado en renglones anteriores, considero es una parte de los desafíos que Puebla tiene en los años venideros, pues la planeación de estas Políticas Públicas, deben de ser con visión de más allá de sus mandatos de cada Gobernante, fortaleciendo con los recursos Humanos y Financieros todo lo que al Ciudadano beneficie.

 

 

“Es sencillo hacer que las cosas sean complicadas, pero difícil que sean sencillas”.

 

 

Tus comentarios: hepercu@hotmail.com