El Felipe Ángeles, un aeropuerto de la 4T

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Ayer por fin AMLO inauguró el aeropuerto Felpe Ángeles.

Nadie se hizo 10 horas de viaje ni pagó 5 mil pesitos de uber.

Yo hice 20 minutos saliendo del helipuerto de la Vista.

Un amigo me dijo que se hizo 15 saliendo del helipuerto de Pepe Ch. Solo me reí y pensé: que arriesgado.

Cuando llegué me encontré a varios políticos y empresarios de alto nivel.

Algunos enemigos del progreso y de la 4T tomaban fotos y trataron de viralizarlas en las redes.

Que si una señora vendía quesadillas sin queso.

Que si parecía tianguis al ver algunos comerciantes con sus productos en el suelo.

Un panista se paró frente a un trompo de tacos al pastor e hizo mofa de ello.

Quizás estos muchachos esperaban ver restaurantes como el Chilis, Starbucks, Carl Juniors, Donut worry kids, Pizza Hut, subway; y todas esas cadenas que tienen al país en los primeros lugares de obesidad, diabetes e hipertensión en el mundo.

Para abordar el avión hay que recorrer al menos 1 km.

Vi una mujer de Nayarit que caminaba como si fuera la primera dama: se veía poderosa y confiada.

Lucía un pantalón de mezclilla blanco que hacía que el recorrido fuera ameno, ‘izquierda, derecha, izquierda…’

También vi a Claudia Sh, la mujer era un mar de lágrimas, acababa de ver el documental de Epigmenio en donde se narraba la fuerza de los mexicanos para construir el aeropuerto. Fue un momento conmovedor, lloraba como si se hubieran muerto 17 personas en la caída de la línea 12 del metro.

Epigmenio también hizo show. Después de años de no tomar una cámara, quiso hacerlo y en el intento tropezó justamente frente a su amo, quien le acarició su calva y en la mente parecía decir: ‘Ay mi pend…’

También me topé con el gobernador de Hidalgo, el Bigotes Fayad, el grababa un tik tok.  ‘la Rufo no me va a dejar atrás` -me dijo-, su baile era más descoordinado que el de su hijastro.

Lo saludé a lo lejos y seguí hipnotizado ese hermoso pantalón nayarita.

Don N no podía faltar.

A lo lejos se escuchaba una batacada y una porra que encabezaba como si fuera una barra futbolera: ‘Si se pudo, si se pudo…’

Algunas focas poblanas bailaban a su alrededor y una mujer les repartía unas cemitas de pata con su big cola.

Por ahí andaba también un decaído Nacho Mir.

Se veía desvelado y frustrado, pero le entraba con cariño a un par de tlacoyos.

Vi a Lord Molécula y recordé a unos periodistas poblanos que les gusta calentar bolas.

Vi a la Vilchis, traía un lápiz en el paladar y repetía con dificultad: Aeropuerto Gelipe Ángeles.

También vi a la Doña y cancillera, Doña Bety.

Quien no paraba de reír y es que acababa de contar un chiste sobre El Copetes Nieto. ‘Me salió del alma, Tonny’: Me dijo.

AMLO se me acercó y me dijo: Quiero que sepaj que ni FECAL, ni Chente, ni el copetesj construyeron algo aji’

El evento finalizó.

Periodistas y políticos se abalanzaron sobre las tlayudos y quesadillas.

Decenas de helicópteros llegaron para recoger a la clase política que ni de broma iba a regresarse en camioneta, taxi o uber.

Los Bejarano comenzaron a cobrar el derecho de piso a los comerciantes que se habían instalado con su venia.

Yo busqué una azafata para que me llevará a mi helicóptero.

Hoy estamos en Los Cabos.

Platicamos de la 4T, hacemos el ritual del mete-saca  y nos preparamos para ir a la inauguración de la refinería y el tren maya.

El Preciso ha cumplido inauguró un aeropuerto que pronto será de primer mundo, aunque siempre habrá quien tenga #OtrosDatos.

 

 

Mi cuenta en tuiter: @soprano_tonny

Columna ficción