Washington y Kiev sellan un tratado económico centrado en recursos naturales y reconstrucción, en medio de críticas por falta de transparencia y garantías concretas.
Washington, 2 de mayo de 2025 — Estados Unidos y Ucrania firmaron un nuevo Acuerdo de Inversión y Reconstrucción, diseñado para atraer capital estadounidense al país europeo en guerra y desarrollar sus recursos naturales clave. El tratado, que consta de apenas diez páginas y dos de apéndice, fue firmado por el secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, y la vice primera ministra y ministra de Economía de Ucrania, Yulia Svyrydenko. A pesar de su tono optimista, el acuerdo ha generado dudas por la falta de garantías de seguridad y por el proceso cerrado de negociación.
El acuerdo, que busca invertir exclusivamente en territorio ucraniano, no implica nuevas obligaciones de deuda para Ucrania, ni altera su camino de integración europea. Según Svyrydenko, EE.UU. contribuirá al fondo con capital financiero e incluso sistemas de defensa aérea como parte del apoyo a Kiev, mientras que Ucrania aportará hasta el 50% de sus ingresos por licencias de extracción de recursos minerales estratégicos como tierras raras, gas y petróleo.
Fondos para extraer, no para proteger
El fondo servirá como instrumento para financiar proyectos de exploración, explotación y elaboración de materias primas, con los beneficios reinvertidos en Ucrania por al menos los próximos diez años. Sin embargo, el acuerdo no contiene cláusulas de garantías de seguridad, una demanda constante del presidente ucraniano Volodimir Zelenski.
En palabras de Jewhen Magda, del Instituto de Política Mundial, se trata de “un acuerdo de futuro, más simbólico que sustancial, que restaura el diálogo con EE.UU., pero deja fuera lo más urgente: la protección del país frente a la agresión rusa”.
Tensiones internas en Ucrania
El pacto aún debe ser ratificado por el Parlamento ucraniano. El partido opositor Solidaridad Europea criticó la falta de inclusión de los legisladores en las negociaciones y exigió a Zelenski dialogar con las distintas fracciones parlamentarias antes de avanzar con su implementación.
¿Cuándo llegarán las inversiones?
Pese a su firma, las inversiones no comenzarán a fluir de inmediato. Expertos como Anatoly Amelin, del Instituto Ucraniano para el Futuro, advierten que el capital estadounidense no llegará hasta que se logre una reducción significativa de las hostilidades o incluso un tratado de paz. “Durante la guerra, los nuevos proyectos no son viables. La inversión podría arrancar entre 2027 y 2028, si las condiciones se estabilizan”, declaró.
Un beneficio político para Trump
Analistas coinciden en que el acuerdo, firmado tras meses de negociaciones desde la toma de posesión del presidente Donald Trump, representa una victoria política interna para su administración, sin comprometerse demasiado con el destino ucraniano. Medios estadounidenses informaron que Trump también habría autorizado la venta de armas por al menos 50 millones de dólares a Ucrania, en lo que sería la primera operación de su segundo mandato.
Aunque el acuerdo representa un paso más en la cooperación económica entre Ucrania y Estados Unidos, deja abiertas numerosas preguntas: ¿cuál será su impacto real en medio de una guerra aún activa? ¿Qué tipo de control tendrán las partes sobre el destino de los recursos? ¿Y por qué, pese a ser un acuerdo económico ambicioso, se omitieron las garantías de seguridad que Ucrania tanto reclama?