En uno de los momentos más destacados de la primera temporada de “El Ala Oeste de la Casa Blanca”, el equipo del presidente Jed Bartlet anima a mostrar su verdadera cara, algo que también vuelve a escucharse ahora en la campaña de reelección de Joe Biden: “Dejad que Biden sea Biden”. Tras un exitoso discurso del estado de la Unión, el presidente se lanza al ataque contra Donald Trump y se mueve estratégicamente por Estados decisivos.
El pasado fin de semana, Biden estuvo en Filadelfia, necesitando nuevamente Pensilvania para renovar su alquiler en la Casa Blanca. Luego viajó a Georgia, un Estado crucial donde se dejó una parte de la presidencia en las pasadas elecciones. En este Estado, Trump también ofreció uno de sus mítines característicos. Biden, por su parte, se presentó ante un grupo reducido de simpatizantes en Atlanta, destacando una inversión de 30 millones de dólares para movilizar el voto latino, asiático y negro.
En Georgia, los dos candidatos intercambiaron reproches en sendos actos el sábado. Trump definió la intervención de Biden ante el Congreso como “una diatriba airada, sombría y llena de odio”, mientras que Biden presentó la cita de noviembre como “una batalla de dos visiones contrapuestas por el alma de esta nación”.
Además de estar plenamente en modo campaña y ataque, Biden se muestra cómodo con su edad, un tema que antes solía desatar críticas. En un anuncio reciente, afirmó: “Mira, no soy un jovencito… pero sé sacar adelante las cosas para el pueblo estadounidense“. También se burla y critica a su contrincante, Trump, destacando sus logros y su energía.
La campaña de Trump, que también tiene 77 años, respondió con un vídeo que intercala imágenes de situaciones embarazosas para Biden, y se pregunta si podrá “sobrevivir hasta 2029” en caso de ganar. Biden, por su parte, continúa con su estrategia y esta semana presentó su presupuesto para 2025, lleno de guiños electorales y medidas para reducir el gasto de las familias, los costes de la vivienda y la atención médica.
El proceso de primarias también continúa su curso, con varios Estados votando este martes. Destacan Georgia, Hawái, Misisipi y el Estado de Washington, citas que carecen de emoción salvo por el interés de que Trump podría conseguir suficientes delegados para confirmar matemáticamente su victoria. Además, Biden se enfrenta a una campaña de sectores progresistas en el Estado de Washington, que piden el voto “no declarado” como medida de protesta.
El apoyo a Israel es otro de los temas destacados en la campaña de Biden, que le ha costado en los sondeos la pérdida del apoyo de los votantes árabes y de sectores más a la izquierda de la coalición demócrata. A pesar de sus esfuerzos, Biden no ha logrado alcanzar un acuerdo de alto el fuego permanente en Gaza antes del inicio del mes sagrado de Ramadán.
Vía El País
