Nayib Bukele: elimina la perspectiva de género de escuelas públicas en El Salvador

Generando críticas y controversias ya que es una medida que ha sido respaldada por el Ministerio de Educación y ha provocado reacciones adversas de grupos feministas.
Nayib Bukele facebook

Por: Jacobi Angélica Barraza Morales

jacobi_bm

COMPARTE:

Facebook
X
WhatsApp

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha generado un revuelo al decidir eliminar la perspectiva de género de la educación pública del país centroamericano. Bukele ha declarado su negativa a permitir “esas ideologías en las escuelas y en los colegios”, una medida que ha sido respaldada por el Ministerio de Educación y ha provocado reacciones adversas de grupos feministas.

La acción del mandatario se produce tras la ratificación de su victoria en las elecciones, donde obtuvo un abrumador 84% de los votos y su partido, Nuevas Ideas, logró una mayoría en la Asamblea Nacional. Esto le otorga a Bukele un amplio margen para implementar políticas controvertidas, incluida esta medida sobre la perspectiva de género.

El ministro de Educación, José Mauricio Pineda, anunció en redes sociales que “todo rastro de la ideología de género” ha sido eliminado de las escuelas públicas, sin ofrecer detalles sobre las implicaciones de esta decisión en un país donde la violencia contra las mujeres es alarmante, con altas tasas de muertes violentas y agresiones sexuales.

La decisión de Bukele llega después de expresar su oposición al aborto y al matrimonio entre personas del mismo sexo durante una conferencia conservadora en Estados Unidos. Estas posturas han generado críticas tanto dentro como fuera del país, con activistas que acusan al mandatario de socavar los derechos de las mujeres.

Feministas y defensoras de los derechos humanos han denunciado el enfoque patriarcal de Bukele y su intento de imponer una visión conservadora en El Salvador. Según Celia Medrano, activista en derechos humanos, el presidente presenta una narrativa que relega a las mujeres a roles tradicionales y busca manipular la religión para promover sus ideas.

La controversia en torno a esta medida refleja las tensiones políticas y sociales en El Salvador, donde las posturas del presidente generan divisiones y críticas por su impacto en los derechos y la igualdad de género.

 

Información tomada de El País