“Europa tendrá que pagar un poco más. El resto del mundo tendrá que pagar un poco más y Estados Unidos pagará mucho menos”
EFE.- Washington, 12 de mayo de 2025 — El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este lunes una nueva orden ejecutiva con la que busca presionar a las farmacéuticas a reducir el precio de los medicamentos en el país, dando un plazo de 30 días para que lleguen a acuerdos voluntarios con el gobierno. De lo contrario, advirtió, se implementará una normativa que igualará los precios estadounidenses con los de otros países donde los fármacos son más económicos.
La medida fue anunciada durante un acto en la Casa Blanca, en el que Trump estuvo acompañado por el secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., quien ha sido instruido para liderar las negociaciones con las compañías farmacéuticas.
“Los estadounidenses están subsidiando los medicamentos de otras naciones”, denunció el exmandatario, aludiendo a que los consumidores en EE.UU. pagan mucho más por los mismos productos que en Europa u otros países. “Europa tendrá que pagar un poco más. El resto del mundo tendrá que pagar un poco más y Estados Unidos pagará mucho menos”, sentenció Trump.
Según sus declaraciones, algunos medicamentos podrían llegar a reducirse hasta en un 90 % en su precio actual. Añadió que las farmacéuticas tienen dos opciones: aceptar los términos de manera voluntaria o enfrentar una intervención directa del gobierno federal.
Durante el acto, Trump relató el caso de un amigo cercano —a quien describió como “muy neurótico, un empresario brillante y con un sobrepeso considerable”— que se quejó del alto precio de una inyección para bajar de peso, la cual cuesta significativamente menos en el Reino Unido.
No obstante, la iniciativa ha generado incertidumbre sobre su viabilidad legal y sus posibles efectos reales en el mercado. Medios estadounidenses han señalado que no está claro qué autoridad tiene el Ejecutivo para intervenir directamente en la fijación de precios internacionales o en las decisiones comerciales de las farmacéuticas.
La propuesta recuerda a una medida similar impulsada por Trump en 2020, durante el final de su primer mandato, cuando firmó un decreto que invocaba el principio de “nación más favorecida”. Ese intento buscaba que EE.UU. pagara los precios más bajos disponibles internacionalmente por medicamentos, pero fue bloqueado por los tribunales tras la oposición de la industria farmacéutica y posteriormente revocado por la administración de Joe Biden.
Esta nueva orden ejecutiva marca un retorno a uno de los temas más controvertidos y recurrentes en la agenda política de Trump: el alto costo de los medicamentos en Estados Unidos, un país donde millones de personas enfrentan dificultades para costear tratamientos esenciales.