Desde que se dio a conocer que Édgar Villarreal, alías “La Barbie”, había escrito una reveladora carta sobre los nexos que existieron entre el gobierno del ex presidente de México, Felipe Calderón, y el conocimiento que habría tenido el mandatario sobre estos durante su sexenio, el tema se encuentra en el ojo del huracán.
Se reveló que Valdez Villareal era un informante de la DEA y el FBI entre 2008 y 2010 que se encargaba de filtrar datos para Estados Unidos acerca de las actividades ilícitas en México.
Hoy en día, el secretario de Seguridad Pública de Calderón, Genaro García Luna se encuentra atravesando un juicio por los nexos que tuvo con el Cártel de Sinaloa cuando era funcionario público, Sin embargo, él no es el único que ha sido señalados entre el “Ejercito de narcopolicías” que orquestaban altos funcionario del sexenio del ex presidente.
De acuerdo con El Soberano, en México se ha presentado un “Narco Estado”, un concepto que hace referencia al control de los negocios del narcotráfico para beneficio de los dirigentes políticos. Bajo esta premisa, la información dada conocer permite identificar en la carta de “La Barbie” a los funcionarios que comandaron estas operaciones.
En primer lugar se encuentra García Luna. De acuerdo con el medio, este hombre contaba con sus propios tentáculos en varias instituciones mexicanas para brindar protección al crimen organizado.
Estas estructuras de protección al crimen organizado pueden ser explicadas a partir de dos figuras: Luis Cárdenas Palomino y Facundo Rosas Rosas. El primero, a pesar de haber sido relacionado con un homicidio y tener dos investigaciones en su contra, fue designado como el número dos de la Agencia Federal de Investigación (AFI) volviéndose un importante brazo operativo de la Policía Federal.
Ese hombre recibió la Medalla al Valor del propio Felipe Calderón en 2009 y además fue condecorado como el mejor policía de México. Pero actualmente es investigado por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) que congeló sus cuentas. Actualmente, este hombre de encuentra prófugo de la justicia mexicana.
Por otro lado, Facundo Rosas Rosas fue comisionados de la Policía Federal durante el sexenio, un recomendado de Genaro García Luna que también estuvo trabajando como secretario Seguridad Pública de Puebla en los tiempos de Rafael Moreno Valle.
Durante su paso por territorio poblano se dispararon las cifra del robo de combustible o huachicol. La situación llegó a tal nivel que tuvo que renunciar junto con dos de sus mandos implicados en delitos de esta naturaleza.
Durante este tiempo, Rosas Rosas acumuló una gran cantidad de denuncias por violaciones a los derechos humanos y persecusión política a quienes eran opositores del régimen de Moreno Valle.
Hasta hace unos meses, emitía declaraciones en medios locales de Puebla sobre que no había sido detenido por la investigación que realizaba la UIF en su contra sobre un presunto lavado de dinero.
En esta lista se encuentran, además, el general Mario Arturo Costa Chaparro y Juan Camilo Mouriño, entonces secretario de gobernación, quienes habrían sido comisionados por el ejecutivo para llevar a cabo reuniones con la Familia Michoacana, con Arturo Beltrán Leyva, con los Zeta 40 y con El Chapo Guzmán.
Hoy en día, ambos ex funcionario se encuentran muertos. El primero fue asesinado y el segundo falleció en un sospechoso accidente.
Las revelaciones de “La Barbie” no solo pusieron el ojo público en la corrupción calderonista, también colocó sobre la mesa la información que reveló en la carta que envió a la periodista fue considerada como veraz y tanto el gobierno estadounidense como el mexicano tenían conocimiento de las relaciones que había con el narco.
Vía: INFOBAE