La actual fiscal del estado, Idamis Pastor Betanzo, señaló que la infiltración de grupos criminales en la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla ocurrió antes de su gestión,
Puebla, Pue. – 25 de julio de 2025 – La fiscal general del estado, Idamis Pastor, reveló este jueves que desde su llegada a la Fiscalía General del Estado (FGE) ha detectado indicios de infiltración de actores criminales y políticos en diversas áreas de la institución, y apuntó al exfiscal Gilberto Higuera Bernal como responsable de esta presunta red de corrupción.
En entrevista, la funcionaria explicó que al asumir su cargo el pasado 20 de diciembre de 2024 comenzó un proceso de depuración institucional para erradicar cualquier vínculo con intereses ajenos a la ley. Afirmó que, aunque no puede precisar cuándo ni cómo ingresaron estos presuntos infiltrados, fue antes de su administración.
“No puedo decir desde qué fecha se infiltraron porque no estaba yo. No te puedo dar una fecha exacta… —¿Desde su antecesor?, se le cuestionó— Sí, y no sé si antes de él también estaban, no te puedo decir eso”, respondió.
La administración anterior, encabezada por Gilberto Higuera Bernal, concluyó el 12 de diciembre de 2024. Tras su salida, Higuera participó sin éxito en la elección judicial de ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y posteriormente fue integrado al Instituto Nacional de Migración (INM).
Cabe recordar que antes de Higuera, la titularidad de la Fiscalía recaía en Víctor Carrancá, quien estuvo al frente de la extinta Procuraduría General del Estado durante los gobiernos de Rafael Moreno Valle y Antonio Gali Fayad. Carrancá dejó el cargo tras la llegada de Miguel Barbosa al poder.
Ocho carpetas y hasta 15 renuncias en proceso de limpieza
En cuanto a las acciones emprendidas para sanear la FGE, Pastor Betanzo informó que actualmente existen ocho carpetas de investigación abiertas contra funcionarios por diversas irregularidades. Asimismo, reveló que entre 10 y 15 personas han renunciado de manera voluntaria desde diciembre, al estar bajo sospecha de conductas indebidas.
“No se trata solo de remover, sino de investigar y fincar responsabilidades. No vamos a permitir que la Fiscalía sea utilizada como refugio para intereses criminales o políticos”, subrayó.
La fiscal aseguró que el proceso de depuración continuará de forma rigurosa hasta garantizar que la institución esté libre de cualquier influencia ajena a su labor constitucional.
Estas acciones coinciden con el compromiso expresado en abril pasado por el gobernador Alejandro Armenta, quien respaldó una reestructuración profunda en las instituciones de seguridad y procuración de justicia en Puebla.
La FGE de Puebla ha enfrentado cuestionamientos por su actuar en casos emblemáticos y por presuntos vínculos de algunos funcionarios con estructuras de poder no formales. La declaración de Idamis Pastor marca un parteaguas al hacer públicos los esfuerzos de reforma institucional y, al mismo tiempo, al evidenciar un legado comprometido que atribuye a su antecesor.