Los hermanos Claudia y David Rivera Vivanco negaron que en Morena existan las cuotas o el nepotismo, pero buscan obtener un espacio en la dirigencia estatal del partido para fortalecer su grupo político.
Ante las próximas renuncias de la presidenta del Comité Ejecutivo Estatal (CEE), Olga Lucía Romero Garci Crespo, y del secretario de Organización, Samuel Aguilar Pala, se perfila su sustitución por el diputado Pável Gaspar Ramírez y David Rivera, respectivamente.
Se prevé que su designación se concrete el próximo 16 de noviembre en una sesión del Consejo Estatal, ya que las renuncias se harán efectivas días antes, debido a que tanto la presidenta como el secretario de Organización dejarán sus cargos para sumarse al gabinete del gobernador electo Alejandro Armenta Mier, quien entrará en funciones el próximo 15 de diciembre.
Olga Romero fungirá como titular del organismo Carreteras de Cuota Puebla, mientras que Aguilar Pala será el secretario de Gobernación del estado.
Ante este escenario, David Rivera confirmó su interés por obtener algún cargo en la dirigencia, pero negó que si se convierte en secretario de Organización represente una cuota o “premio de consolación” para su hermana.
En entrevista sostuvo que su nombramiento no es un hecho, aunque lo haya perfilado la propia dirigente estatal, pues afirmó que la decisión recae en el Consejo Estatal y este no tiene consigna o una “linea”.
Por su parte, Claudia Rivera rechazó que el arribo de su hermano al CEE obedezca a un acuerdo político con el armentismo, aunque lo respaldó en su aspiración y confió en que haría un buen papel.
De igual forma, descartó encabezar un grupo que pueda representar un contrapeso en Morena, al señalar que los propios estatutos partidistas prohiben las corrientes, ‘tribus’ o grupos políticos.
No obstante, la exalcaldesa ostenta una diputación federal; su pareja, Roberto Zataráin Leal, es diputado local y ahora su hermano está cera de llegar a la secretaría morenista.
