Rogelio Ramírez de la O permanecerá en el cargo a petición de Claudia Sheinbaum: Prioridades y objetivos de su gestión

Por: Adriana Colchado

@tamalito_rosa

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Esta mañana, Rogelio Ramírez de la O anunció que, a petición de la virtual presidenta electa Claudia Sheinbaum, continuará en su cargo al frente de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) por tiempo indefinido. Con esta decisión, Ramírez de la O se convierte en el cuarto funcionario en la historia de México en lograr una continuidad similar.

En su comunicado, Ramírez de la O delineó los objetivos que guiarán su gestión en el futuro inmediato. Entre las metas prioritarias se encuentra la reducción de la deuda pública, objetivo que buscará cumplir anualmente de cara al 2025. La meta es alcanzar niveles de deuda en relación con el Producto Interno Bruto (PIB) que sean sostenibles a mediano plazo, apuntando a un rango de alrededor del 3 por ciento del PIB.

Además, enfatizó la importancia de mantener una comunicación clara y actualizada con inversionistas y agencias calificadoras. Este esfuerzo tiene como finalidad confirmar las prioridades del gobierno en términos de estabilidad macroeconómica, prudencia fiscal y la viabilidad de los objetivos fiscales planteados.

Otro aspecto central de su gestión será la colaboración con Petróleos Mexicanos (Pemex). Ramírez de la O señaló que aprovechará el respaldo obtenido en el Congreso para optimizar el uso de los recursos públicos destinados a la empresa estatal. Asimismo, se comprometió a confirmar a los organismos internacionales e inversionistas privados que el proyecto del gobierno se fundamenta en la disciplina financiera, respetando la autonomía del Banco de México, el apego al estado de derecho y facilitando la inversión privada tanto nacional como extranjera.

La continuidad de Rogelio Ramírez de la O en la SHCP es una señal de estabilidad y compromiso con las políticas económicas actuales, así como una apuesta por la continuidad y la confianza en su liderazgo para enfrentar los retos económicos que México tiene por delante