Un familiar de la masacre de Bavispe, Sonora, cuenta el dolor y la sorpresa tras el asesinato del candidato de Movimiento Ciudadano a la alcaldía de Cajeme. “¿Qué le pasa este país?”, clama Adrián LeBarón sobre el homicidio de su abogado.
Por Óscar Balderas
EMEEQUIS.– Abel Murrieta no llegará a la cita que tenía este 14 de mayo en Tijuana, Baja California, para comunicar los avances del caso contra los responsables de la masacre de Bavispe, Sonora, contra la familia LeBarón: este jueves, sus asesinos le dieron dos disparos que acabaron con su vida.
El candidato de Movimiento Ciudadano a la alcaldía de Cajeme, Sonora, y exprocurador general del estado, fue asesinado en un ataque directo mientras entregaba folletos a peatones y automovilistas, a quienes intentaba convencer de su política de mano dura contra la delincuencia.
“¡Mataron al hombre que iba a hacer justicia a mi hija! ¿Quién le hará justicia ahora?”, dijo Adrián LeBarón a EMEEQUIS a los pocos minutos de que se conociera la noticia del magnicidio del político sonorense.
Abel Murrieta, además de candidato a presidente municipal, litigaba contra un brazo armado del Cártel de Sinaloa en defensa de la familia mormona que busca justicia para sus nueve seres amados asesinados y calcinados el 4 de noviembre de 2019.
“No puedo creerlo… nos íbamos a ver mañana… nos veríamos en Tijuana, me dijo que tenía información muy importante que darme, pero que no podía decirme por teléfono… no puedo creerlo… acabo de ver un video de él tendido en el suelo… su cuerpo… esto no puede ser”, dijo Adrián LeBarón, quien tenía puestas sus esperanzas de justicia en la labor de Abel Murrieta.
LA JUSTICIA EN PAUSA
Con el asesinato del abogado que competía para las elecciones de 6 de junio se corre el riesgo de que decenas de investigaciones sobre el crimen organizado en Sonora se congelen, mientras las víctimas esperan justicia, aseguró Adrián LeBarón.
Apenas dos horas antes de su asesinato, Abel Murrieta refrendó en Twitter que su candidatura buscaba recuperar la paz en Cajeme, un municipio que ha vivido el asedio del Cártel del Pacífico en su afán por defender el territorio de la incursión del Cártel Jalisco Nueva Generación.
“Este movimiento #VaEnSerio contra la inseguridad. Cajeme ya no puede, ni va a seguir tolerando a políticos corruptos que dejan impunes a quienes arremeten contra los ciudadanos. Yo estoy con Abel porque él #EstáPesado”, escribió Abel Murrieta unos 120 minutos antes de ser asesinado.
El ahora fallecido candidato fue un férreo crítico de la estrategia de seguridad del candidato morenista a gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, a quien señaló como principal generador de violencia en la entidad por una fallida estrategia de paz.
“Lamento profundamente el artero atentado en contra del exprocurador Abel Murrieta y candidato a la alcaldía de Cajeme esta tarde. Este hecho debe esclarecerse y no quedar impune”, escribió en su cuenta de Twitter Alfonso Durazo, candidato puntero a gobernador y responsable entre 2019 y 2021 de la seguridad en el país.
Adrián y Julián LeBarón en una manifestación en la Ciudad de México. Foto: Mario Jasso / Cuartoscuro.com.
SONORA SE MUEVE CON EL CRIMEN
La noticia del asesinato ha movilizado de inmediato a políticos nacionales y locales, como la gobernadora sonorense Claudia Pavlovich y el candidato a gobernador de la alianza opositora Ernesto Gándara, quienes han condenado el crimen.
“Era mi amigo, mi abogado, el que iba a darle justicia a mi hija… No sé qué pensar de este país, no sé qué decir… estoy en shock… me siento frustrado, ¿qué le pasa a este país?”, lamentó Adrián LeBarón.
La consultora política Etellekt contabilizó que, tras el asesinato del candidato de Movimiento Ciudadano, su Indicador de Violencia Política registró un total de 563 hechos delictivos contra políticos y candidatos, así como 83 políticos que han sido asesinados este ciclo electoral.
Hasta la noche de este jueves, las autoridades de Sonora no han reportado la detención de los presuntos asesinos de Abel Murrieta.
@oscarbalmen