“¿Motivos personales?” Es la versión oficial de la renuncia de Miriam Veras Godoy, jefa de vacunación Covid. En los pasillos de la Secretaría de Salud cuentan que su salida la causó su hermano, acusado de estar ligado a huachicoleros de Hidalgo.
EMEEQUIS.– En la Secretaría de Salud no se creen el cuento de que la exjefa del plan de vacunación en México, Miriam Veras Godoy, renunció a su cargo por “razones personales”. En cambio, aseguran que la verdadera razón de su salida tiene que ver con un familiar cercanísimo ligado a actividades criminales con quien el gobierno federal no quiere relacionarse.
Miriam Veras Godoy, quien dejó su puesto el 17 de enero pasado como estratega de la inmunización contra el nuevo coronavirus, es la hermana de Humberto Veras Godoy, diputado local en Hidalgo por Morena y a quien el año pasado la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda le congeló sus cuentas por presunto lavado de dinero.
La acusación que hizo la oficina de Santiago Nieto se remonta al tiempo en que Humberto Veras Godoy fue rector (2010-2016) de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), una institución que desde el año pasado está en la mira de las autoridades federales.
En febrero de 2020, la UIF inició una extensa investigación tras conocer que la universidad estatal había recibido inusuales depósitos y transferencias electrónicas desde Suiza, Reino Unido y España hasta sus cuentas bancarias. En total, 156 millones de dólares de origen inexplicable y posiblemente ilícito.
Cuatro meses después, el hermano de la exjefa del plan de vacunación contra la COVID19 ya no pudo usar sus tarjetas de débito y crédito: la UIF congeló sus cuentas bancarias y lo acusó de ser uno de los cabecillas de un complejo entramado para convertir dinero sucio en efectivo limpio usando su cargo como rector de la UAEH.
LA LIGA HUACHICOLEROS-JEFA DE VACUNACIÓN
De acuerdo con la investigación, ese dinero sucio provenía de la compra y venta de combustible robado a Petróleos Mexicanos, es decir, del huachicol, el tipo de crimen organizado contra el que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha batallado desde principios de su sexenio.
Al familiar de Miriam Veras Godoy también se le ubicó como la mano derecha y cómplice de Gerardo Sosa Castelán, expresidente del patronato de la universidad hidalguense, quien hoy está preso acusado de cargos de corrupción y robo de hidrocarburos.
Los dos indiciados –Humberto Veras Godoy y Gerardo Sosa Castelán– son identificados como políticos cercanos al presidente nacional de Morena, Mario Delgado, quien ha negado su amistad con ambos acusados.
En la Secretaría de Salud aseguran que esas peligrosas conexiones familiares fueron las que empujaron a la experimentada doctora fuera de la campaña de vacunación para frenar la pandemia.
UNA RENUNCIA INJUSTA
“Se sacaron de la manga eso de ‘motivos personales’. Eso es lo que dicen cuando no quieren decir las verdaderas razones. Lo cierto es que se dieron cuenta que la doctora Miriam iba a ser protagonista del programa social más importante del año y, como estaba rodeada de escándalos, le dieron cuello.
“Alguien no hizo bien su tarea de hacer controles de confianza y se dieron cuenta muy tarde que habían puesto al frente de la campaña de vacunación a una doctora muy experimentada, experta en lo suyo, pero que estaba injustamente pegada a los escándalos de su hermano”, narró una fuente de la Secretaría de Salud a EMEEQUIS.
El 17 de enero pasado, durante la conferencia vespertina para monitorear el avance del nuevo coronavirus en México, el doctor José Luis Alomía, director general de Epidemiología en la Secretaría de Salud, confirmó el rumor de que la también directora general del Centro Nacional para la Salud de la Infancia y de la Adolescencia (Censia) había abandonado el cargo.
Cuestionado por las razones, José Luis Alomía se limitó a decir que fue por “motivos personales”. Luego, el argumento se movió a “motivos de salud”, aunque tampoco se detalló a qué padecimientos se referían.
EL REMATE: DISCREPAR CON GATELL
Mientras las explicaciones daban tumbos, el gobierno federal se apresuró a borrar todo rastro de Miriam Veras Godoy en la administración federal: rápidamente su nombre, cargo, experiencia y logros fueron borrados de las páginas oficiales. En menos de 24 horas, su paso por el gobierno federal fue eliminado.
“Fueron muy injustos con ella. El pretexto para sacar a la doctora Miriam fue que ella estaba en desacuerdo con ciertos puntos del programa de vacunación Covid-19, pero eso es lo normal. Siempre hay discrepancias. La sacaron porque su hermano le incomoda a Morena”, asegura la fuente consultada por este reportero.
Otras versiones apuntan a que su salida es un híbrido entre las controversias que rodean a su familia y sus quejas a la estrategia que encabeza el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell.
Miriam Veras Godoy fue la doctora que diseñó el plan de vacunación contra la pandemia y que resolvió estrategias espinosas sobre cuándo comenzar a vacunar mexicanas y mexicanos, dónde, por qué y, sobre todo, a quiénes.
Su táctica original incluía como prioridad a las médicas, enfermeros y profesionales de la salud que están en la primera línea de batalla contra el nuevo coronavirus.
Sin embargo, su plan fue alterado por el subsecretario Hugo López-Gatell y el secretario de Salud Jorge Alcocer, quienes incluyeron a los “Siervos de la Nación”, ese grupo de representantes de la llamada Cuarta Transformación que recibirían la vacuna antes que médicos en hospitales privados que están en la primera línea de batalla.
DOS BANCOS: VACUNAS Y ANTIVACUNAS
“La doctora Miriam tenía muchas diferencias con Gatell. Ella pensaba en lo médico y ellos en lo político. Fue una combinación de todo. La quisieron ‘agandallar’ y encontraron su punto débil: su hermano, un tipo muy raro, muy oscuro, con mala fama”, aseguró otra fuente consultada por este medio.
Según la fuente trabajadora de la Secretaría de Salud, Miriam Veras Godoy apostaba por la urgencia de traer vacunas Covid-19 a México desde el extranjero, mientras Hugo López Gatell apostaba a que sin necesidad de inoculaciones el país alcanzaría la inmunidad de rebaño y el virus perdería fuerza casi de manera natural.
Esa diferencia entre los grupos en el gabinete presidencial a favor y en contra de las vacunas fue la puntilla que sacó a la doctora Miriam Veras Godoy de la Secretaría de Salud, perseguida por la mala reputación familiar.
En el gobierno federal repiten que su estrepitosa salida se puede resumir en una frase: la hermana terminó pagando los pecados del hermano… y los de sus malas compañías.
@emeequis
