Ciudad de México. – En el Palacio Nacional se mantiene la expectativa de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tome una acción decisiva antes de que Donald Trump asuma el poder, a fin de contener los planes de deportaciones masivas anunciados por el mandatario electo. La idea, que tomó fuerza tras el agradecimiento de Biden al gobierno mexicano por su cooperación en la lucha contra el fentanilo, incluye la posibilidad de una orden ejecutiva que amplíe la protección para migrantes.
El plan, que podría beneficiar a unas 900 mil personas, incluye extender la duración de visas de trabajo, reforzar la protección legal para migrantes provenientes de países como Venezuela y Nicaragua, y agilizar los expedientes pendientes en el Departamento de Seguridad Interior.
¿Es suficiente la colaboración de México?
Una de las grandes preguntas en Palacio Nacional es si los decomisos de fentanilo y los arrestos de líderes criminales realizados por México son un argumento sólido para persuadir a Biden. Sin embargo, también existe preocupación por el efecto que este gesto podría tener en la retórica antiinmigrante de Trump, quien ha endurecido su postura respecto a México.
Mientras tanto, la presidenta Claudia Sheinbaum tiene programada una reunión con gobernadores del norte del país para diseñar estrategias de contención migratoria, anticipándose a las posibles medidas de Trump.
Una relación delicada
La tensión en la relación bilateral también está marcada por la política interna de Estados Unidos. En la Cancillería mexicana se percibe que un movimiento a favor de los migrantes podría beneficiar a los demócratas, ayudándolos a recuperar terreno tras las recientes elecciones.
No obstante, en el entorno de Sheinbaum se maneja con cautela cualquier comentario que pueda incomodar a Washington. Por ejemplo, se evita mencionar el papel de Estados Unidos en la captura de Ismael “Mayo” Zambada, mientras que la posibilidad de un encuentro entre Sheinbaum y Trump parece fuera de consideración, dada la sensibilidad de la transición.
Trump y sus controversias internacionales
El análisis de la política exterior de Trump también incluye episodios recientes, como su cena con el primer ministro canadiense Justin Trudeau en Mar-A-Lago, que generó tensiones tras filtraciones de que Trump mencionó su interés en anexar Canadá. Este tipo de actitudes refuerza la precaución en la estrategia mexicana.
En este delicado equilibrio, México busca obtener el último respaldo de Biden sin provocar reacciones inesperadas de la futura administración estadounidense, consciente de que cualquier movimiento en falso podría agravar los desafíos en la relación bilateral.
Vía LPO