La noche del 6 de enero, una inquietante escena en San Martín Texmelucan, Puebla, desató una fuerte movilización policiaca. En la calle Labastida, entre 11 de Noviembre y Crisantemo, en la colonia Solidaridad, vecinos alarmados reportaron al 911 el hallazgo de una hielera blanca ensangrentada sobre una manta con un mensaje amenazante dirigido a presuntos líderes delincuenciales de la zona.
A los pocos minutos, elementos de la Policía Municipal, Estatal, la Marina y la Guardia Nacional arribaron al lugar para asegurar la escena. El pánico inicial sugirió que la hielera podría contener restos humanos, pero tras la revisión se confirmó que se trataba de una cabeza de cerdo.
La manta, de color blanco con letras negras, advertía a ciertas personas que debían abandonar San Martín Texmelucan. Este incidente se suma a la creciente preocupación por la seguridad en el municipio, conocido por problemas de robos, asaltos y ejecuciones. El levantamiento de la manta fue realizado por personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla.
Aunque el uso de una cabeza de cerdo puede parecer un intento burdo de intimidación, las autoridades no descartan que este tipo de mensajes sea parte de una táctica para infundir miedo entre los rivales.
