El político insiste en que las acusaciones son falsas y que él es víctima de una “calumnia” mientras que los padres del adolescente afirman que han tenido que ingresarle para tratamiento psiquiátrico
Benjamín Saúl Huerta se ha convertido en la última pata coja de Morena antes de las elecciones del próximo 6 de junio. El diputado federal se ha visto obligado a retirar su candidatura para su reelección en Puebla entre acusaciones de abuso a un menor. Sin embargo, mantendrá su condición de aforado. Pese a que la Fiscalía de Delitos Sexuales de Ciudad de México solicitó la retirada de su protección judicial para poder proceder con la investigación por abuso de un menor, esta deberá esperar a una sesión extraordinaria. El diputado en Puebla que aspiraba a ser reelegido insiste en que se ha armado un caso en su contra y que es víctima de una “calumnia” contra él y su partido. Por su lado, los padres del adolescente de 15 años que le denunció han relatado a los medios de comunicación que han tenido que ingresar a su hijo en un hospital psiquiátrico por una crisis nerviosa y pensamientos suicidas.
En la sesión del pasado miércoles en la sección instructora de la Cámara baja —la instancia legislativa que controla la conducta o responsabilidad política y penal de los servidores públicos— se acordó notificar a Huerta de la radicación de la acusación. El proceso de instrucción solo elaboró el dictamen contra el gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, del Partido Acción Nacional. El proceso contra el político acusado por delincuencia organizada, lavado de dinero y defraudación fiscal se llevará a cabo este viernes en la Cámara, donde Morena tiene mayoría con 256 de las 500 bancas y podrá decidir el futuro de uno de sus opositores.
Por el momento, Huerta conserva su protección judicial hasta que se resuelva la petición de la Fiscalía. La petición de desafuero se ha retrasado junto a las de Mauricio Toledo, del Partido del Trabajo (PT), acusado de enriquecimiento ilícito por la Fiscalía de Ciudad de México, y del fiscal del Estado de Morelos, Uriel Carmona Gándara, investigado por el Ministerio Público por realizar operaciones con recursos de procedencia ilícita. El proceso contra Huerta podría reanudarse si dos tercios en la cámara acuerdan celebrar una sesión extraordinaria en junio.
Claudia Pasto, diputada federal del PRI, miembro de la sección instructora y único voto en contra en el dictamen de Cabeza de Vaca, ha denunciado las dos velocidades para procesar a los políticos dependiendo del partido al que pertenezcan. “No podemos pensar que los [procesos] que son contra opositores tengan que hacerse con prisa y oscuridad y cuando se trata de funcionarios de Morena, y que incluso hay acusaciones gravísimas contra infantes, entonces sea la calma y los pasos de tortuga, no es posible tener justicia selectiva”, ha sentenciado.
Huerta aspiraba a ser reelegido, pero todas sus posibilidades se hundieron cuando fue detenido el pasado jueves por la Policía de Ciudad de México por un presunto delito de abuso sexual. Un repartidor de volantes de 15 años que trabajaba en su campaña le había denunciado por agredirle sexualmente en una habitación del hotel Exes Cities en la colonia Juárez. “Entré al hotel. Me dijo que iba a rentar dos habitaciones. Llega y renta una habitación con una cama. Me sentía muy mareado, no podía caminar bien, me dolían las piernas. Llegué a la habitación, me acosté, ya no podía, estaba mal. Me acuesto y él se va al baño. Sale totalmente desnudo, intentó pararme para arrimarme, pero ya no podía”, relató el menor a los medios locales.
Huerta demostró su condición de aforado y quedó en libertad. El diputado, que insistía en su inocencia y denunciaba una estratagema contra su imagen y la de Morena, estaba decidido a continuar con su campaña. La grabación de una supuesta llamada de Huerta a la madre de la víctima para “llegar a un acuerdo económico” para que ella no le “hundiera”, frustró cualquier posibilidad de continuar en la política. A diferencia del caso del candidato en Guerrero, Félix Salgado Macedonio, quien fue arropado por su partido ante las acusaciones de violación, Morena decidió dar la espalda de Huerta. El presidente del partido, Mario Delgado, informó que el candidato en Puebla renunciaba de forma “definitiva e irrevocable” a la reelección por el distrito 11. La Fiscalía asegura que hay dos menores de edad que le han denunciado.
En una entrevista con el periodista Ciro Gómez Leyva, Huerta ha subrayado repetidas veces que él es inocente. “Me sembraron, me crearon, me generaron toda esta circunstancia que me hace parecer culpable”, aseguraba Huerta, y añadió que tenía la consciencia tranquila. Por su lado, la familia del menor ha ratificado la denuncia ante la Fiscalía y en rueda de prensa denunciaron que están recibiendo amenazas. En una entrevista en los noticieros de Televisa, la madre del adolescente narró que su hijo ha tenido que ser ingresado en un hospital psiquiátrico.