En un operativo sin precedentes en el marco de la Estrategia Nacional de Seguridad, autoridades federales han logrado desmantelar una red de tráfico ilícito de hidrocarburos
31 de marzo de 2025
Con un golpe histórico en el puerto de Tampico, Tamaulipas. La operación, que involucró a diversas instituciones del Gabinete de Seguridad, resultó en el aseguramiento de 10 millones de litros de diésel, además de armas y vehículos de alto poder. Este operativo ha sido calificado como uno de los más efectivos en la lucha contra el robo y comercio ilegal de hidrocarburos en el país.
Un esfuerzo conjunto para combatir el crimen organizado
El golpe al tráfico ilegal de combustibles fue llevado a cabo por un amplio despliegue de fuerzas federales. La Secretaría de Marina (Semar), la Fiscalía General de la República (FGR), a través de su Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Guardia Nacional (GN) y autoridades aduanales trabajaron de manera coordinada en el operativo.
El operativo comenzó con tareas de inteligencia e investigación, donde las autoridades detectaron una serie de irregularidades en la carga de un buque que arribó al puerto de Tampico el pasado 19 de marzo. A pesar de que el barco transportaba, en apariencia, aditivos para aceites lubricantes, la revisión descubrió que llevaba un cargamento de diésel de procedencia ilícita.
De la inteligencia a la acción
Tras obtener la información crucial, las autoridades intervinieron rápidamente. El buque fue interceptado por elementos de la SEMAR y la FGR, quienes lograron asegurar el cargamento de 10 millones de litros de diésel, un volumen significativo que representa una de las mayores incautaciones realizadas en el país en los últimos años. Además, las investigaciones condujeron a cateos en diversos predios en la ciudad de Altamira, Tamaulipas, en los que se decomisaron vehículos y armamento de alto calibre utilizado en las operaciones ilegales de la red de tráfico de hidrocarburos.
Las autoridades detallaron que la operación también involucró el desmantelamiento de un complejo operativo que operaba en las sombras, cuyo objetivo era abastecer de combustible de procedencia ilícita a diversas regiones del país, alimentando una red criminal de tráfico de hidrocarburos.
Desmantelando redes de delincuencia organizada
El aseguramiento de esta cantidad de diésel no solo afecta directamente las finanzas de las organizaciones criminales involucradas, sino que también debilita significativamente las estructuras de las bandas que operan en Tamaulipas, un estado históricamente marcado por la presencia de grupos dedicados al robo de hidrocarburos y su comercialización ilegal.
El tráfico de hidrocarburos es uno de los delitos más rentables y perjudiciales para el país, ya que no solo representa una grave amenaza económica, sino también ecológica y de seguridad. A través de estas redes, se desvían millones de litros de combustible que podrían ser utilizados para fines lícitos, afectando tanto a las autoridades como a las empresas que dependen de estos recursos.
El combate al robo de hidrocarburos sigue firme
Este operativo es una clara señal de que el gobierno mexicano continúa comprometido con la lucha contra el crimen organizado y el tráfico de hidrocarburos, que ha sido una de las principales preocupaciones en los últimos años debido a su impacto tanto en la economía como en la seguridad nacional. Las autoridades han afirmado que continuarán con el monitoreo y seguimiento de las rutas de tráfico ilegal de combustibles, y que se incrementarán los esfuerzos para garantizar que las redes criminales involucradas en este delito sean desmanteladas de forma definitiva.
El aseguramiento de 10 millones de litros de diésel en Tamaulipas es un éxito rotundo para las fuerzas de seguridad del país, y demuestra que la colaboración entre las diferentes instituciones de seguridad es fundamental para enfrentar los retos del crimen organizado en México.