Javier Corral y Miguel Ángel Yunes Márquez, dos ex panistas mutados a morenistas, se harán cargo de la Comisión de Justicia en el Senado de la República. Corral presidirá la comisión, mientras que Yunes Márquez será su mano derecha como secretario. No es casualidad, pero sí irónico que dos que transitaron del blanquiazul envueltos en polémicas que los pudieron hacer pisar la cárcel, sean quienes se encarguen de la Comisión de Justicia.
Irónico pero lógico.
Javier Corral, quien militó en el PAN desde 1982, siempre fue un crítico feroz de su propio partido. En 2023, decidió cortar lazos con Acción Nacional, argumentando que el partido se estaba acercando peligrosamente al PRI y a “su corrupción”. Ahora, Corral se une a las fuerzas de Claudia Sheinbaum y asume la presidencia de la Comisión de Justicia, pero no sin polémica. Apenas el 14 de agosto, agentes anticorrupción de la Fiscalía de Chihuahua intentaron detenerlo en un restaurante en la Roma, pero, como en una escena de película, fue rescatado por Ulises Lara, de la Fiscalía de la Ciudad de México. A pesar de todo, Corral sigue jugando en las grandes ligas.
Miguel Ángel Yunes Márquez, por su parte, tiene su propia historia de “fuga”, pero por la puerta de atrás. Expulsado del PAN por Marko Cortés tras votar a favor de la reforma al Poder Judicial —voto que fue clave para su aprobación—, no tardó en encontrar refugio en Morena. Su sonrisa al lado de Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López lo dice todo: no le dolió tanto dejar el azul. A pesar de que aún no se oficializa su incorporación a Morena, ya es claro que su futuro está pintado de guinda.
La Comisión de Justicia, ahora con Corral y Yunes al frente, promete ser un espacio de poder clave. Morena ha ampliado la integración de este órgano de 17 a 19 miembros, dejando ver que los movimientos internos del Senado están lejos de ser casuales.