“El banco está haciendo un negociazo”, se queja el representante del grupo gasolinero que sufrió el fraude: pide la intervención de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores. Mientras tanto, Santander dice que su reclamo es “improcedente”.
Por Patricia Tapia
EMEEQUIS.– Primero: rostros sonrientes, atención personalizada, alfombra roja. Así fue como Santander México convenció a un grupo gasolinero de Querétaro para que cambiara las cuentas bancarias de las cinco empresas que lo integran a dicha institución financiera.
Todo pintaba bien hasta que fueron víctimas de fraude: les robaron 3 millones 300 mil pesos a través de la plataforma digital de la banca electrónica del banco.
Lo que hace cuatro meses era cordialidad para convencer a Grupo Óleo de que trasladara sus cuentas a Santander, para obtener los “múltiples beneficios” de un paquete Pyme gasolinero, en octubre pasado, tras el fraude, se convirtió en indiferencia pura y dura: “Ya no nos dan la cara”, se queja Alan Infante Díaz de León, representante de la agrupación.
En entrevista con EMEEQUIS, el empresario cuenta con enojo que nunca habían pasado una situación así, a lo largo de los años han trabajado con otros bancos y jamás habían padecido esto.
“Hay una persona de origen uruguayo que se llama Pablo Cecchi, que es el encargado del área Pyme Zona Bajío quien, con otra persona, son las que enamoran al empresario para poder atraer las cuentas al banco. Ellos fueron a tocar las puertas de nuestro grupo… decidimos hacerlo, dejando toda nuestra confianza en su plataforma. Pablo nos dijo: ‘yo necesito que todas las cuentas de todo tu grupo estén en nuestra banca para obtener los beneficios. Así lo hicimos”.
Algo extraño: esta persona les dijo que las cinco cuentas, aun teniendo una razón social diferente, iban a funcionar con el mismo token (mecanismo de autenticación).
EMEEQUIS ha dado seguimiento a los múltiples casos de fraudes en cuentas de Santander, varios afectados crearon un grupo de Facebook para organizarse y emprender una acción legal colectiva contra el banco. Al principio eran 60 personas defraudadas bajo diferentes modus operandi. Ahora hay casi 2 mil integrantes.
El número de integrantes de este grupo de Facebook crece día con día.
UN MILLÓN POR HORA
Alan cuenta a detalle que, desde el 28 de octubre, la plataforma de la banca electrónica de Santander comenzó a estar lenta, pero no pasó a mayores ese día.
Por la dinámica del grupo, diariamente se hacen numerosas operaciones de compraventa, consumos, tickets, etcétera, por esta razón, dice que saben perfectamente cómo funciona y toda la precaución que debe tomar.
El 29 de octubre, al empezar a hacer sus operaciones que comienzan desde las 8 de la mañana, también había lentitud en la plataforma, pero ahora les aparecía un mensaje: para ofrecer una mejor experiencia digital y para su seguridad, estamos actualizando nuestra base de datos. Un momento por favor…
Pero pasaban los minutos, horas y nada. “No era una página falsa, no era una dirección IP diferente, estábamos en la página oficial de Santander”, recalca el empresario, quien incluso compartió un video que da cuenta de dicho mensaje (en el resumen de Youtube).
Esto comenzó a levantar sospechas, pues era algo muy raro. Decidieron llamar al banco y comentar lo que estaba sucediendo. Les dijeron que ellos no tenían conocimiento de que estuviera algún mensaje. Estaba sucediendo lo que tanto temían: les estaban vaciando las cuentas.
En menos de tres horas, los presuntos delincuentes dieron de alta varias cuentas de personas físicas y morales. De las cinco cuentas del grupo gasolinero, en total pudieron hacer transferencias por 3 millones 300 mil pesos. Son hasta 10 movimientos los que no reconoce la agrupación de empresas.
Pudo haber sido peor si no hubieran reaccionado, señala Alan: “manipularon la banca estando nosotros en la misma banca, hay cero seguridad”.
Como procede, hicieron ese mismo día la reclamación ante el banco. Al otro día se levantó la denuncia ante la Fiscalía General del Estado de Querétaro, aunque Alan sabe que en estas situaciones la vía legal efectiva es la del juicio mercantil.
En octubre pasado, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) dijo a esta revista digital que las quejas por transferencias no reconocidas contra Santander han crecido 186% entre enero y septiembre de este año, en comparación con igual periodo de 2019.
SI ESTO ES “LO MÁS SEGURO”…
El empresario, quien además es abogado, refiere que estas personas le ofrecieron un producto top, que se suponía era lo más seguro de lo más seguro: “Imagínate, entonces todo lo demás es fácilmente es violable”.
Mientras tanto, Santander México, en su reporte del tercer trimestre del año, presume que, gracias a la inversión y esfuerzos del Banco por digitalizar su base de clientes y aumentar lealtad, ha generado 4.7 millones de clientes digitales y 4.4 millones de clientes móviles.
“Yo voy a ganar la sentencia en seis meses, lo sé, pero ¿qué pasa con la demás gente defraudada que no tiene los medios? el problema ahí va a estar y nadie hace nada”. Por esto fue que el empresario decidió alzar la voz y alertar a colegas y clientes.
LA INDIFERENCIA HIERE
El enojo también parte del desentendimiento del banco, pues este directivo Pyme de la Región Bajío se comprometió a que, tras el fraude, en dos días le tendría los detalles de qué fue lo que sucedió. Ha pasado un mes y sólo obtiene los mismos mensajes de que se está haciendo la investigación y que en cuanto tenga algo se lo hará saber. “Nosotros supuestamente somos un cliente Select”.
En todo momento el banco los culpa de que seguramente ingresaron a una página falsa, que no saben qué pasó. Lo manejan como si su caso fuera aislado.
El 19 de noviembre, el banco le respondió que su reclamación era improcedente, al igual que a otras víctimas de fraude, “su respuesta es de machote”.
“El banco está haciendo un negociazo, el empresario sí va a demandar, pero imagínate los miles de afectados de esos que les roban de a 300 mil, 400 mil pesos…Yo voy a agotar las acciones que tenga que agotar, al banco lo que le interesa es dejar de responsabilizarse de una acción. Cuántos de esos miles de asuntos los van a condenar que devuelvan el dinero, ¿un 10%?”.
Se necesita que intervenga la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), pide el empresario, quien reflexiona y dice que un fraude de estos puede destruir a una compañía en horas…
TAREA PENDIENTE
En México, uno de los retos para el sistema financiero ha sido incrementar su ciberseguridad. En 2018, el costo total anual de respuesta y de recuperación ante incidentes de seguridad digital de las entidades e instituciones financieras en México fue de 107 millones de dólares.
Además, 100% de las entidades e instituciones financieras han identificado algún incidente (ataques exitosos y no exitosos) de seguridad cibernética en su contra.
Mientras que 51% de las entidades dicen que el presupuesto de seguridad digital (incluidos aspectos de seguridad de la información, ciberseguridad y prevención del fraude usando medios digitales) equivale en promedio a menos del 1% de su Ebitda (flujo operativo).
El uso de tecnologías digitales emergentes, aplicadas a herramientas, controles o procesos de seguridad digital en entidades e instituciones financieras en México, se encuentra aún rezagado, se reconoce.
Todo lo anterior se desprende del documento “Estado de la Ciberseguridad en el Sistema Financiero Mexicano”, que elaboró la Organización de Estados Americanos con apoyo de la CNBV.
@ptcervantes