Después de 13 años, Puebla regresa oficialmente a las competencias de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), marcando un giro político y presupuestal en la administración del gobernador Alejandro Armenta Mier, quien encabezó el abanderamiento de la Delegación Poblana que competirá en la Olimpiada Nacional CONADE 2025.
Política pública, recursos y alineación con el gobierno federal
En un mensaje con fuerte carga política, Armenta subrayó que su administración está alineada con la presidenta electa Claudia Sheinbaum, al sostener que el impulso al deporte es parte del proyecto de transformación nacional. “El deporte es el mejor instrumento de transformación humana”, declaró el gobernador, quien dejó claro que su gobierno duplicará el presupuesto destinado a estímulos deportivos.
El compromiso no es menor: el Ejecutivo poblano triplicó el monto de reconocimiento económico a los atletas medallistas. Quienes obtengan medalla de bronce recibirán 10 mil pesos (antes 3 mil); plata, 25 mil pesos (antes 5 mil); y oro, 50 mil pesos (antes 10 mil).
Además, las y los atletas que sean selectivos estatales o nacionales contarán con una beca fija del gobierno del estado, con el objetivo de garantizar condiciones dignas para su desarrollo deportivo y académico. Estas medidas buscan fortalecer la infraestructura del alto rendimiento en Puebla y sentar las bases para una política pública integral.
Puebla, sede y protagonista
El impulso no solo será para competir. El estado será también sede de importantes eventos nacionales, entre ellos los Juegos Escolares Deportivos y, junto con la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), los Juegos Universitarios Nacionales, lo que posiciona a Puebla como un nuevo eje logístico del deporte federado en el país.
La secretaria de Juventud y Deporte, Gabriela Sánchez Saavedra, confirmó que Puebla participará con 126 atletas, en 31 disciplinas como charrería, voleibol de sala, básquetbol, tenis, rugby 7, box y ajedrez, entre otras.
Además, Puebla será coanfitrión de la Olimpiada CONADE 2025 junto con Tlaxcala, Yucatán, Jalisco y Colima. La ceremonia inaugural se llevará a cabo este viernes 16 de mayo en el Estadio Tlahuicole, ubicado en la ciudad de Tlaxcala.
Un regreso con narrativa de transformación
Esta reincorporación, después de 13 años de ausencia, representa no solo una política de rehabilitación deportiva, sino una narrativa de reivindicación institucional, tras el rezago que tuvo Puebla en materia de deporte competitivo durante los últimos tres sexenios.
El propio gobernador Armenta aprovechó el evento para lanzar una narrativa emotiva: “Me emociona auténticamente el éxito, ver cómo un deportista evoluciona en su vida […] nos genera un espíritu de disciplina al que aspiran nuestros padres”. La frase refuerza el enfoque de su gestión: asociar el deporte con valores familiares, transformación social y disciplina de vida.
Contexto político: deporte como proyección de gobierno
Este regreso no es casual. En un momento en que el gobernador Armenta busca consolidar su liderazgo político y marcar diferencias con sus antecesores —particularmente con Sergio Salomón Céspedes y Miguel Barbosa, quienes dejaron rezagadas las políticas deportivas—, el relanzamiento del deporte como estrategia social forma parte del nuevo diseño de identidad de su administración.
En ese sentido, el acto de abanderamiento también funcionó como una plataforma de posicionamiento político y de vinculación directa con la agenda de Claudia Sheinbaum, cuyo proyecto nacional apuesta también al deporte como herramienta de inclusión y desarrollo comunitario.